
Se presentó oficialmente en la sede del Centro de Patrones y Oficiales Fluviales, de Pesca y de Cabotaje Marítimo de la República Argentina un proyecto original, diseñado por decisión del propio sindicato y su secretario general, Julio González Insfrán, para la construcción de un buque remolcador de empuje a GNL para transporte de grandes tonelajes de carga por vía fluvial. La iniciativa está en etapa de búsqueda de financiamiento por parte de capitales privados para su construcción en el Astillero Río Paraná Sur.
El entusiasmo generado por este proyecto se debe a que este tipo de buques permitiría reducir drásticamente el impacto ambiental y los costos logísticos del transporte fluvial de cargas, aprovechar un combustible ecológico del que la Argentina dispondrá en gran cantidad a partir de los yacimientos de Vaca Muerta, y brindar un fuerte factor de competitividad para la recuperación de la marina mercante argentina, con la consiguiente generación de miles de puestos de trabajo.
Según adelantó el ingeniero y empresario Daniel De Monte, titular del Astillero Río Paraná Sur que tiene a su cargo el proyecto técnico del remolcador de 4500 a 6000 HP, la iniciativa podría concretarse en 14 meses, a partir del otorgamiento del capital necesario.
“La industria naval argentina ya cuenta con capacidad para hacerlo y sólo falta definir los detalles del financiamiento”, aseguró De Monte sobre la construcción del primer buque remolcador de empuje de diseño y fabricación 100% nacional, propulsado con un combustible ecológico.