El pasado 15 de agosto se realizó en el astillero Meyer Werft, en Papenburg, el primer corte de acero del barco gemelo del AIDAnova, el primer crucero del mundo completamente alimentado con GNL de bajas emisiones. Hace solo unos días, AIDA Cruises recibió el Blue Angel, la etiqueta ecológica del gobierno federal alemán, por el diseño ecológico del AIDAnova.
Con el inicio oficial de la construcción del segundo barco de esta innovadora generación de buques AIDA, que se pondrá en servicio en la primavera de 2021, la compañía continúa su curso y realiza una contribución adicional para reducir las emisiones de los cruceros. Ya en 2023, zarpará el tercer crucero a GNL de AIDA Cruises, «Made in Germany». Mediante el uso de GNL, las emisiones de partículas y óxidos de azufre se eliminan casi por completo, en tanto las emisiones de NOx y CO2 se reducen de manera sostenible.
«Para 2023, alrededor de la mitad de todos los huéspedes de AIDA navegarán en nuestros buques a GNL de última generación, equipados con muchas innovaciones técnicas extras para lograr mayor eficiencia, menor consumo de combustible y recursos conservados. A su vez, estamos ofreciendo a nuestros huéspedes a bordo una extraordinaria variedad de opciones de vacaciones individuales, entretenimiento innovador y conceptos culinarios que impulsarán el turismo en Alemania», dijo el presidente de AIDA, Félix Eichhorn.
Con una inversión de alrededor de dos mil millones de euros solo para la construcción de ambos barcos en Alemania, la compañía está contribuyendo a la economía y a la creación de empleos seguros en la industria de la construcción naval y el suministro marítimo. Además, AIDA Cruise está explorando actualmente el uso de pilas de combustible y GNL de fuentes renovables en sus cruceros. La empresa planea probar la primera unidad de pila de combustible a bordo de un buque AIDA en 2021.
Fuente: AIDA Cruises
