Además, el funcionario explicó que se establece un arancel de entre 0 y 15% para la importación de vehículos que originalmente funcionaban a gasolina o diesel, pero que fueron transformados a GNV antes de ingresar a territorio boliviano.
Respecto a la gasolina y el diesel, Arce aclaró que pagarán un arancel de importación “muy parecido” al vigente con anterioridad al nuevo Decreto Supremo. Los más perjudicados serán los vehículos antiguos a diesel, ya que “pagarán más impuestos”.
La norma, publicada el 5 de febrero en la página de internet de la Gaceta Oficial, busca promover la importación de unidades a gas natural y desalentar aquellas que utilizan gasolina y diesel.
Según reporta el diario La Razón, el director general ejecutivo de la Entidad Ejecutora de Conversión a Gas Natural Vehicular (EEC-GNV), Hernán Vega, informó que, de acuerdo al Registro Único para la Administración Tributaria Municipal (RUAT), el parque automotor de Bolivia llegó a 1.205.356 motorizados el año pasado, y de esta cantidad el 24% usa gas natural, es decir, 288.519. El total de esos cambios se realizó entre 2000 y diciembre de 2013.