Según datos recientes, este país cuenta con más de 4.000 vehículos a metano, unos 320 más que el año anterior (+ 7,5%). Esta flota incluye 1.500 autobuses y 1.100 camiones de basura, además de casi 900 vans, taxis y otros vehículos livianos. En cuanto a la infraestructura de carga, hay 90 estaciones de gas natural, 39 abiertas al público. De esas 39 estaciones, 15 tienen L-GNC, mientras que tres sólo GNL. La mayoría de los 50 puntos privados se utilizan para abastecer camiones de basura y buses.
Una gran parte de los camiones pesados a gas del país es operada por los servicios municipales de las grandes ciudades. La recolección de basura en Madrid, por ejemplo, se hace con alrededor de 470 vehículos que funcionan con GNV. Por otra parte, unos 800 autobuses urbanos de la capital madrileña también operan con GNV, lo que representa el 40% de la flota total de 2.000 unidades.
Este uso a gran escala de buses y camiones a gas ha brindado ventajas significativas: en España conducir un vehículo a metano permite ahorrar en costos de combustible casi el 50% en comparación con la gasolina y más del 30% en comparación con el diésel. Además, utilizar este combustible ecológico también redujo las emisiones de óxido de nitrógeno, óxido de azufre y partículas, así como los niveles de gases de efecto invernadero y el ruido.
Gas Natural Fenosa prevé construir ocho nuevas estaciones de GNL en los próximos dos años. Si los resultados son positivos, construirán nueve estaciones más para 2019-2020. Además, Seat, Volkswagen-Audi España y Madrileña Red de Gas firmaron un acuerdo para impulsar el uso de vehículos a gas y crear la infraestructura necesaria. En cuanto a los incentivos, el Gobierno español anunció recientemente el nuevo Plan de Aire 4 PIMA que por primera vez incluirá, en un presupuesto separado, vehículos que funcionan con gas.
Fuente: NGVA Europe