El 21 de diciembre se conmemoró el inicio de la actividad en el país, ya que ese mismo día en 1984 se inauguró el primer surtidor en la ciudad de Buenos Aires, en la intersección de las avenidas Leandro N. Alem y Córdoba, en una estación de bandera YPF. Desde entonces, los avances tecnológicos marcharon a la par de las transformaciones de los vehículos y sus motores y, en la búsqueda de ampliar soluciones para los usuarios, se fueron sumando actores al mercado.
En el acto de apertura estuvo presente Raúl Alfonsín, el entonces presidente de la Nación. En esos años del retorno de la democracia, diversos factores favorecieron la puesta en marcha del proyecto nacional del GNV: las prolíficas reservas de gas natural, la infraestructura de los gasoductos, el apoyo de la Secretaría de Energía, la normativa vigente y toda la industria que por ese entonces permitía llevar adelante la colocación de equipos y la construcción de estaciones de servicio. El marco normativo se completó con otra resolución dictada en 1987 por la Secretaría de Comercio, a través del decreto 1752, que declaraba al GNC de “Interés Nacional”.
La puesta en marcha del surtidor se enmarcó en el Plan de Sustitución de Combustibles Líquidos desarrollado por la Secretaría de Energía de la Nación, Yacimientos Petrolíferos Fiscales y Gas del Estado.
En estos 30 años, la industria del GNV se convirtió en un sector afianzado en la Argentina, mientras que la investigación y el desarrollo de las empresas locales hicieron que los productos argentinos sean un referente indiscutido a nivel mundial. Actualmente, existen 1.690.327 vehículos habilitados para su circulación, según los datos que provee el Enargas a noviembre de 2014. Las estaciones de servicio que ofrecen el combustible suman 1.939.