
El Port de Barcelona incorporó a su flota de servicio 10 vehículos de energía alternativa, como GNC e híbridos eléctricos, reforzando así su política ambiental y su apuesta por la movilidad sostenible. Todos los vehículos disponen de la etiqueta medioambiental ECO de la DGT española.
Siete de estos vehículos se destinaron al departamento de Conservación y Ayudas a la Navegación. Se trata de un camión de 19 metros de altura equipado con grúa de elevación de personas, una plataforma de elevación de cargas, un vehículo adaptado específicamente para dar el servicio de suministro de agua a los fuselajes, y cuatro furgonetas ligeras asignadas al servicio de Ayudas a la Navegación y que se utilizarán para la conservación y mantenimiento de los faros y del resto de señalización marítima de la costa de Barcelona y Girona.
Los tres primeros vehículos industriales están equipados con motorización dual fuel a GNC-diésel. Este sistema permite reemplazar parte del diésel inyectado por gas natural, consiguiendo una reducción de las emisiones de CO2 y, muy especialmente, de NOx, que se reduce en un 90%. Las cuatro furgonetas ligeras están preparadas para funcionar con GLP y gasolina.
Finalmente, el Port sustityó tres turismos propulsados por gasolina por unidades de motorización microhíbrida eléctrica que también tienen la etiqueta ECO.
El Port de Barcelona sigue trabajando para conseguir una movilidad sostenible dentro del ámbito portuario mediante la incorporación de vehículos propios cero emisiones o con etiqueta ambiental ECO -actualmente dispone de 42 vehículos eléctricos y 10 vehículos con etiqueta ECO- y desarrollando una infraestructura de carga de los vehículos eléctricos en su territorio que da servicio tanto a su flota como al conjunto de la Comunidad Portuaria de Barcelona.
Fuente: Port de Barcelona