Se trata de un proyecto de 4.8 millones dólares a cargo de la Autoridad de Desechos Sólidos del Condado de Lancaster (LCSWMA, según sus siglas en inglés) e incluye 14 camiones Peterbilt con motor Cummins Westport ISX 12L, que costaron unos 2.2 millones de dólares, y un punto de carga ubicado en su Centro de Transferencia. «Queremos ofrecer una tecnología más limpia en la comunidad y ayudar a tener un futuro más respetuoso del medio ambiente y más económicamente viable», dijo el CEO de LCSWMA, Jim Warner.
Si bien la Autoridad utilizará para su flota un sistema de carga lenta con 16 surtidores, durante la noche, este proyecto también incluye un sistema de abastecimiento de llenado rápido con cuatro surtidores para otras flotas de vehículos. El costo total de la construcción de la infraestructura fue de alrededor 2.6 millones de dólares y estuvo a cargo de la empresa Clean Energy. Además, es el primer sistema de su tipo en el condado de Lancaster.
Por su parte, los camiones fueron adquiridos en 2013 y puestos en marcha el mes pasado. Estos llevarán los residuos desde la estación de transferencia en Lancaster a sus instalaciones en Bainbridge y Harrisburg, así como a su vertedero en Conestoga. Para ayudar a compensar el incremento (37%) de la compra de los vehículos a gas, LCSWMA recibió una subvención de 350 mil dólares del Departamento de Protección Ambiental de Pensilvania, como parte de su Programa de Desarrollo Energético de Gas Natural.
«El liderazgo con visión de futuro que tiene LCSWMA está extendiendo los beneficios económicos y ambientales del GNV tanto a los camiones de basura como a los de carga pesada. Tenemos sumo interés en apoyar y ayudar a esta flota, ya que ofrece un importante servicio a la comunidad de Lancaster», señaló Ray Burke, vicepresidente de Clean Energy.
Fuente: LCSWMA